Un violento episodio conmueve a la localidad de General Alvear, en Mendoza. El lunes pasado, una beba de un año y nueve meses sufrió heridas graves en la cabeza al ser atacada por un perro de raza pitbull de su propia familia. El tío de la menor tuvo que sacrificar al animal de una puñalada para lograr separlo de la niña y así salvarla.
“Si no actuaba en el momento estaríamos hablando de otra cosa. La zamarreaba para todos lados y no la soltaba. Tomé esa decisión de apuñalar al perro para salvarla”, explicó David Becerra, el tío de la niña atacada, en diálogo con TVA General Alvear.
”El perro estaba siempre atado, estaba bien cuidado, comida nunca le faltó, pero son perros que cuando crecen se van poniendo más malos. Mi sobrina siempre lo acariciaba y era redócil, pero no sé lo qué pasó que se volvió loco, se soltó (estaba atado con cadena) y la atacó”, aclaró Becerra.
Tras el ataque, la niña debió ser derivada de urgencia inicialmente al Hospital Enfermeros Argentinos, situado a unos 300 kilómetros al sur de la capital provincial, y luego al Hospital Schestakow, de San Rafael.
“Ingresó al hospital una niñita de un año y nueve meses toda ensangrentada y con pedido de auxilio de sus familiares, se le practicó una vía periférica porque venía en llanto pero había perdido mucha sangre, y se le hizo una evaluación rápida y se descubrió una mordedura importante en el cuero cabelludo”, precisó el jefe de la Guardia del centro sanitario alvearense, Mauro Cuchiarini.