El Banco Central de Argentina tomó medidas para evitar problemas en los ingresos al aumentar la tasa de interés de los plazos fijos y reducir en dos puntos la tasa de financiación de saldos impagos de tarjeta de crédito. Estas medidas entrarán en vigencia a partir de junio, disminuyendo la tasa de interés de tarjetas de crédito del 88% actual al 86% TNA. La intención es evitar un mayor aumento en el costo de financiamiento para las pequeñas y medianas empresas, manteniendo tasas subsidiadas para proyectos de inversión y capital de trabajo en 76% y 88% TNA, respectivamente.
Es importante destacar que esta reducción de tasa no se aplica a los créditos ya adquiridos y que se están pagando regularmente con tasas o cuotas establecidas, sino que se refiere a los saldos impagos en el resumen de cuenta total.
En abril, las operaciones con tarjetas de crédito experimentaron un aumento del 6,7% en comparación con marzo, lo que representa un valor cercano a la inflación. En términos interanuales, el crecimiento fue del 85,7%, por debajo de los niveles de inflación estimados. Esto indica una disminución en términos reales según un informe de First Capital Group (FCG), lo cual plantea una situación difícil que podría afectar el futuro del mercado de tarjetas de crédito.
Según Guillermo Barbero, socio de FCG, aunque no han cambiado los factores que limitan el crecimiento, como el aumento en el costo de financiamiento, la menor oferta de cuotas, las limitaciones en los presupuestos familiares, la disminución de los titulares de tarjetas y la prudencia de las entidades financieras frente al riesgo, los límites de crédito se están actualizando gradualmente a lo largo del año, aunque no de manera masiva.
