La Factura de Crédito Electrónica impulsa el financiamiento para pymes del sector energético argentino

La factura de crédito electrónica (FCE) es un instrumento financiero que fue establecido por ley en el año 2018. A través de esta herramienta, las pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector energético pueden anticipar el pago de sus facturas de una manera sencilla y sin contraer deudas, utilizando una plataforma segura y fácil de usar.

En Argentina, el sector energético, especialmente en la exploración y explotación de petróleo y gas en la región de Vaca Muerta, ha experimentado un crecimiento constante que se espera que se profundice en los próximos años. El contexto internacional, la inauguración del gasoducto Néstor Kirchner y la llegada de inversiones han creado un ecosistema dinámico que demanda cada vez más bienes y servicios por parte de las grandes empresas. Ante este crecimiento y la alta inflación, cada vez más pymes optan por adelantar el cobro a través de la comercialización de facturas de crédito electrónica en una plataforma que involucra a múltiples bancos.

Satisfacer esta creciente demanda implica un desarrollo continuo de la cadena de valor del sector, que incluye a más de 2000 pymes proveedoras de las grandes empresas de energía. Para atender a estas necesidades de infraestructura, logística, capacitación y bienes, se requieren instrumentos financieros modernos para el sector.

Los beneficios de la FCE son varios. Las facturas de crédito electrónicas emitidas por las pymes pueden ser negociadas como cualquier activo financiero en plataformas digitales que conectan a las empresas más pequeñas con los bancos, quienes compiten por comprar esas facturas ofreciendo diferentes descuentos.

Pablo Sanucci, CEO y fundador de Invoitrade, una plataforma líder en el mercado, explicó que la FCE empodera a las pymes, ya que los bancos pujan por comprar sus facturas ofreciendo tasas competitivas y transparentes. Según Sanucci, la factura de crédito electrónica y plataformas como la de ellos están cambiando el paradigma del financiamiento para las pymes en Argentina. Simplemente al tener una cuenta en Invoitrade y subir la FCE a la plataforma, más de 10 bancos pueden ofrecer efectivo al instante sin riesgos futuros y de manera transparente.

La principal ventaja de esta operación es que las pymes pueden financiarse de forma transparente dentro del sistema financiero sin generar deudas, a diferencia del sistema de endoso de cheques. Al no haber endoso en un cheque, las pymes no asumen ningún riesgo relacionado con la factura que están negociando, obteniendo financiamiento inmediato y sin riesgos.

Además, en plataformas como Invoitrade, los bancos y las empresas están en igualdad de condiciones, ya que las entidades financieras no pueden discriminar las operaciones según el tamaño de la empresa oferente.

Sanucci señaló que cuando una gran empresa acepta una factura de crédito electrónica, está fortaleciendo su cadena de valor al brindar a su proveedor pyme la opción de anticipar el cobro de esa factura dentro del sistema financiero y de manera inmediata. Se estima que alrededor de 220,000 pymes emiten mensualmente un volumen de facturas superior al billón de pesos. La FCE es un instrumento financiero oficial que hasta el momento no ha sido muy popularizado, pero al estar asociado con plataformas de acceso seguro y sencillo, comenzará a abrir nuevos caminos en el mundo del financiamiento para las pymes argentinas.

El Régimen de Factura de Crédito Electrónica MiPymes es una herramienta que busca impulsar el financiamiento del capital de trabajo y mejorar la certeza de cobro para las pymes proveedoras de las grandes empresas.

La emisión de factura de crédito electrónica es obligatoria para las pymes cuando facturan a una empresa grande por una operación de compraventa de bienes, locación de cosas muebles, servicios u obra, siempre y cuando el monto total sea igual o superior a $546,737.